Las competencias en materia de perfumería en la Región de Grasse declaradas Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, el miércoles 28 de noviembre de 2018
Las competencias en materia de perfumería en la Región de Grasse representan una cadena de técnicas y conocimientos específicos de este territorio, que se ha ido forjando generación tras generación desde el siglo XVI. En aquella época los curtidores, que perfumaban las pieles con esencias locales, se fueron convirtiendo en perfumistas, y esta evolución consolidó la actividad del cultivo de la planta olorosa y de la transformación de las materias primas naturales.
Estas competencias se practican en la región de Grasse desde hace generaciones, entre mar y montañas, en la región de los Alpes Marítimos y de la Costa Azul, cerca de Italia. Este territorio, conocido como Región de Grasse, se extiende hasta las que se denominan "fronteras afectivas" ya que algunos artesanos que se identifican con Grasse ejercen su actividad a varios kilómetros de la zona geográfica. Y así, por Región de Grasse, se entienden sus fronteras administrativas, culturales y afectivas: Grasse, Gars, La Roquette-Sur-Siagne, Le Mas, Le Tignet, Les Mujouls, Mouans-Sartoux, Pégomas, Peymeinade, Saint-Auban, Saint-Cézaire-sur-Siagne, Saint-Vallier-de-Thiey, Séranon, Spéracèdes, Valderoure, Cabris, Valbonne, Roquefort-Les-Pins, Tourrette-sur-Loup, Le Rouret, Châteauneuf-Grasse, Le-Bar-sur-Loup, Opio, Gourdon, Caussols, Courmes, Vallauris y cualquier municipio que se reivindica como patrimonio de Grasse. Además, París es otro enclave en el arte de componer el perfume, ya que las redes profesionales entre Grasse y la capital son densas.

 

El cultivo de la Planta Olorosa

El cultivo de la planta olorosa incorpora conocimientos específicos relacionados con los suelos, el clima, la fineza en la observación de la naturaleza y técnicas agrícolas específicas como la poda, el tutorado, el riego, la fertilización y el injerto. El/la cultivador/a debe dominar cada gesto aplicado a cualquier tipo de cultivo vegetal.

Los oficios asociados al cultivo de la planta olorosa incluyen por supuesto a las personas que cultivan y recolectan así como a aquellas que son portadoras de unos saberes particulares, como los injertadores que están en vías de desaparición y que dominan, en particular, las técnicas del injerto del rosal Centifolia en el Indica Major y la técnica del injerto del jazmín Grandifolium en el jazmín Oficinal, que requieren unos conocimientos específicos.

Al trabajar con materia viva, las personas dedicadas al cultivo recuerdan que pueden dominar las técnicas, los gestos, pero nunca el cielo…


 

 

El conocimiento de las materias primas naturales y su transformación

La transformación de las materias primas naturales requiere un conocimiento avanzado de las materias primas y un perfecto control de los modos de extracción de las moléculas odoríferas de los vegetales. En muchos casos, estas técnicas de producción se crearon o perfeccionaron en el territorio de Grasse. Cabe citar las técnicas ancestrales como el "enflorado", o procedimientos innovadores como la "eco-extracción" desarrollada en Grasse desde los años 2000.

La transformación de las materias primas es obra de numerosos oficios, desde los obreros y técnicos de taller, como los destiladores, hasta los ingenieros en investigación y calidad, los químicos… A estos oficios se suman otras actividades relacionadas, como la de los caldereros o sopladores de vidrio. Este condensado de conocimientos se va enriqueciendo con el paso de los años, y hay que tener en cuenta que el descubrimiento de una nueva planta olorosa constituye el inicio de una nueva "aventura".


 

 

 

El Arte de componer el Perfume

El arte de componer el perfume exige una capacidad de imaginación, de construcción intelectual, basada en un conocimiento de las materias primas naturales. A partir de una inspiración, que conduce a la idea de un olor (de una forma olfativa), el perfumista deberá desarrollar con sus herramientas –los ingredientes odoríferos– un proyecto con unas características fisicoquímicas y unos efectos sensoriales esperados (notas centrales, de salida, de fondo). Luego decidirá la textura. Este planteamiento, entre ciencia y arte, es comparable al del músico que, desde el dominio del solfeo, compone una obra musical.